Expertos en psiquiatría de la Universidad de Oxford (Reino Unido) estiman que en los próximos diez años no habrá nuevos medicamentos contra la depresión, a causa de la desinversión en ese campo por parte de la industria farmacéutica.
“Las pruebas que deben hacer antes de lanzar un medicamentos cuestan alrededor de mil millones de dólares”, detalló al diario The Guardian Guy Goodwin, profesor de psiquiatría de Oxford.
En un estudio publicado hace un año en la revista NeuroPerspective, se encontró que los gigantes farmacéuticos redujeron la investigación en drogas psiquiátricas en 70% tan sólo en los últimos 10 años.
Andrea Cipriani, profesor asociado de psiquiatría de la misma universidad, agregó que “todavía hay un fracaso desde el punto de vista científico al no haber logrado comprender cómo trabajan estos fármacos antes de empezar a mejorarlos”.
De acuerdo a los datos recolectados por los especialistas durante sus años de investigación en Londres, el 58% de los pacientes responden a los antidepresivos durante los ensayos clínicos, pero un 40% también lo hace a placebos.
Además de los millones requeridos para la investigación y la falta de avances, los expertos señalan como una de las causas también la mala publicidad que han ganado con el tiempo éste tipo de estudios.
El Prozac, lanzado en la década del 80, parece ser el último avance destacado. Sin embargo el popular antidepresivo, basado en inhibición selectiva de la recaptación de serotonina, sólo es efectivo para un poco más de la mitad de las personas que lo consumen, y aún existen muchas preocupaciones sobre sus efectos adversos.